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Por:Hola.com

Morgan Freeman no piensa quedarse de brazos cruzados ante el problema del racismo. Él ha vivido de cerca este grave problema y ahora se ha embarcado en una lucha por la integración racial. El actor, consciente del «poder» de su fama, ha protagonizado un documental canadiense ambientado en las escuelas de Mississippi, su tierra natal, para denunciar y poner voz al problema del racismo que sigue latente en estas zonas. Freeman pretende aportar así su particular granito de arena a la causa del racimo y atajar el problema desde la más tierna infancia cuando la educación y la tolerancia son valores esenciales a inculcar a los niños. Estos días el actor ha viajado hasta Ontario para asistir a la presentación del documental con el que pretende concienciar a niños, padres y educadores sobre la integración racial.

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